viernes, 1 de junio de 2012

DELIRIO ONÍRICO







  Cuando una pequeña claridad irrumpe en la habitación, el hombre se incorpora. Mira con ternura a la mujer que yace a su lado, le acaricia el rostro y se levanta. Se viste con parsimonia. Sin hacer un solo ruido baja las escaleras y sale a la calle.

  Al despertar, la mujer sonríe con nostalgia. La noche pasada junto a su esposo ha sido maravillosa. No importa que él haya muerto hace mucho y que todo haya sido un sueño.

 

2 comentarios:

  1. Antonio:
    Muy bueno lo que ha publicado.
    ¿Dónde termina el sueño y empieza la realidad?
    ¿Acaso un fantasma real incidió en el mundo de los sueños de su amada?
    Puesto que no conocemos bien cómo se generan los sueños, cómo puedo pretender descifrar estos enigmas. Por eso, a mi me gustó.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  2. Gracias por tu generosa participación de siempre. Te mando un abrazo.

    ResponderEliminar